Si te pasas entrenando fuerza y no haces cada cierto tiempo una semana de descarga, nunca disfrutarás de todos estos beneficios
Recupera y gana, las ventaja de realizar una semana de descarga en tu planificación de entrenamientos de fuerza son muchas, te las explicamos.
Semana de descarga, las razones para aplicarla
Un programa de entrenamiento exhaustivo y periódico, debe contemplar semanas/días de “descarga” o recuperación activa. Finalizar un ciclo de entrenamiento con una semana de bajo impacto es una estrategia que no solo ayuda a una recuperación de los niveles de exigencia previos, sino que es vital para seguir ganando y creciendo a corto y largo plazo.
A medida que tu cuerpo se adapta a la carga, usa menos unidades motoras para mover el mismo peso. Esta es la razón por la que, para ser más fuertes/más grandes, debes proponer un nuevo estímulo que arrastre a las unidades motoras, ¿cómo lo haces?: pues chaval… levanta más peso o levántalo más rápido (¡Boom!).
Pero claro, sin recuperación, habrá un “tope” en el que no se produzcan mejoras continuadas, y por esto es que la Semana de Descarga es tan importante.
La fatiga sistemática es una deuda de recuperación relacionada con el bajón en la “señal” nerviosa, lo que disminuye la capacidad de un músculo para trabajar.
La fatiga muscular se asocia con el agotamiento del propio músculo para desempeñarse (ATP, glucógeno, proteínas…).
En ambos casos la recuperación viene definida por recuperar el nivel fisiológico, una vez interrumpido.
De la misma forma también puedes alcanzar un tope “mental”, un muro psicológico del que necesitas “bajarte” por un período.
Unos pueden tolerar largos períodos de carga intensa, otros no tanto. Mi opinión es que, de manera general, optes por introducir una semana de “descarga” cada 4-5 semanas de tu programa de entrenamiento, coincidiendo con el final de cada ciclo. Siempre que sigas un programa serio, intenso y progresivo, todo sea dicho.
Fuente
Semana de descarga, las razones por las que la necesitas (sportlife.es)